Normas y responsabilidades

El éxito de nuestros propietarios es vital para la misión de Viviendas del Condado. Los siguientes requisitos se han esbozado para garantizar su éxito.

Los arrendadores deben cumplir todas las normas de calidad de la vivienda establecidas por Viviendas del Condado. Esto implica garantizar que la unidad de alquiler cumple requisitos específicos de salud y seguridad, como calefacción, fontanería e integridad estructural adecuadas.

Los propietarios son responsables de abordar con prontitud cualquier reparación necesaria y los problemas de mantenimiento que surjan durante el arrendamiento. Es necesario un mantenimiento regular de la propiedad, que incluya la resolución de problemas relacionados con el saneamiento, la seguridad y la integridad estructural. De lo contrario, podrían reducirse (suspenderse) los pagos.

Los propietarios deben cobrar al inquilino la parte del alquiler que le corresponde e informar sin demora a Viviendas del Condado de cualquier cambio en el alquiler, en los contratos de arrendamiento o en la situación de ocupación.

Los propietarios están obligados a cooperar con las inspecciones programadas realizadas por Viviendas del Condado. Estas inspecciones garantizan que el inmueble sigue cumpliendo las normas de vivienda exigidas durante toda la vigencia del contrato de arrendamiento.

Los propietarios deben cumplir todas las leyes y normativas de vivienda justa y tratar a los participantes en el programa HCV de la misma manera que a cualquier otro inquilino. Esto incluye la prohibición de cualquier forma de discriminación por motivos de raza, color, religión, sexo, discapacidad, situación familiar u origen nacional.

Mantener una línea abierta de comunicación con Viviendas del Condado y su inquilino es crucial. Esto garantiza que todas las partes estén informadas de cualquier cambio, problema o preocupación relacionados con el arrendamiento y la propiedad.